— ¿Qué es la foliculitis?
— La foliculitis es una afección cutánea provocada por la inflamación de los folículos pilosos, de ahí su nombre. La causa de esta hinchazón es una infección originada por bacterias u hongos que atacan estos folículos. Los lugares en los que suele aparecer son la cara, cuero cabelludo, torso e ingles en la región genital y perianal. No se trata de un problema en general de importancia médicamente aunque en infecciones importantes puede dar lugar a pérdida permanente de cabello y cicatrices y psicológicamente afectar de forma importante en la autoestima.
— ¿Qué la diferencia del acné?
— El acné es una afección inflamatoria derivada de un exceso de grasa en las glándulas sebáceas, pero no infecciosa y suele presentarse en la adolescencia. Además, la foliculitis se produce en los folículos pilosos, donde nace el pelo, que pueden derivar en forúnculos. Sus tratamientos son diferentes por lo que es importante acudir a un especialista en dermatología que pueda determinar de qué patología se trata cuando existen dudas.
— ¿Cuáles son sus síntomas?
— La primera manifestación es la aparición, siempre en zonas en las que se produzca el nacimiento del vello, de bultos enrojecidos o espinillas cabeciblancas alrededor del orificio folicular. Si la afección sigue evolucionando se crearán ampollas llenas de pus que se abren y forman costras o pueden requerir de una intervención de drenaje. Entre sus síntomas se encuentra la picazón o ardor y el dolor o sensibilidad en la piel.
— ¿Existen factores de riesgo?
— La foliculitis es más habitual en personas que padecen alteraciones endocrino-metabólicas; enfermedades sistémicas; estrés o ansiedad así como tener piel grasa, que favorece las obstrucciones foliculares; y atópica, que predispone a sobreinfecciones, con patologías como el acné o la dermatitis. Asimismo, el vello rizado y/o grueso aumenta el riesgo. Por último, favorecen su aparición la ingesta de algunos medicamentos, como las cremas esteroides o ciertos tratamientos antibióticos de larga duración para el acné.
— ¿Cómo se trata?
— El tratamiento dependerá del tipo de foliculitis que se padezca, su gravedad y las características de la persona afectada pero las opciones oscilan desde el uso de medicamentos, ya sean cremas, lociones, champús, antibióticos o antifúngicos, o pastillas. Si estos tratamientos más convencionales fracasan es posible probar la depilación láser o la cirugía menor cuando se produce un forúnculo para drenar la pus existente.