En esta época de cuarentena por la pandemia del Coronavirus, que nos ha tocado vivir, cobra protagonismo no solo los profesionales sanitarios sino también un aparato llamado respirador, nos explica el Doctor Sergio Martínez, intensivista de HPS.
Los primeros respiradores fueron los pulmones de acero que actuaban con presión negativa y que se utilizaron en la pandemia de la polio que se inició en 1953 en Dinamarca, llegando a España en 1956.
Posteriormente aparecieron los respiradores con presión positiva que son los que se utilizan hoy día para atender a los pacientes que se encuentran en estado de gravedad por COVID-19. Para ello se necesita de la colocación de un tubo en la tráquea sellado con un balón llamado neumotaponamiento, quedando este tubo conectado al respirador.
Estos respiradores han evolucionado mucho en los últimos años, de la misma forma que se han desarrollado otros muchos sectores como la tecnología y la automovilística. Al principio era un respirador simple que inyectaba aire a los pulmones pero ahora son aparatos muy sofisticados que permiten adaptarse a las necesidades de cada paciente en particular, realizando mediciones de la dinámica y mecánica pulmonar para personalizar el procedimiento. Avances que son hoy determinantes para tratar a un paciente con COVID-19 o Coronavirus.
En los años 70 se generalizan las Unidades de Medicina Intensiva en las cuales se incluye un aparato de ventilación mecánica o respirador por cada cama. Actualmente tienen respiradores las camas de reanimación y los quirófanos.
La misión del respirador, nos recalca el Doctor, es suplir la función pulmonar cuando ésta peligra bien por enfermedad pulmonar (caso COVID-19), por enfermedad neuromuscular, por traumatismo torácico o por situación de coma.
Hoy en día y en la pandemia por Covid-19 o Coronavirus en la que nos encontramos, la necesidad de ingreso en UMI de una gran cantidad de pacientes en poco tiempo con problemas pulmonares graves y que obviamente precisan ventilación mecánica, es decir, un respirador, han desbordado todas aquellas estancias donde se dispone de respirador (UMI, reanimación y quirófanos).
Los respiradores de la Unidad de Medicina Intensiva del HPS son “Evita” de la empresa Dräger. Son unidades de ventilación altamente avanzada para uso en asistencia respiratoria de pacientes con insuficiencia respiratoria aguda. Ofreciendo capacidades de ventilación de alto rendimiento, monitorización integral y funciones de tratamiento efectivas.
Por todo ello, y debido al COVID-19, se necesitan más respiradores para poder ofrecer a estos pacientes un soporte ventilatorio que permita darles tiempo para que se recupere su capacidad pulmonar. Este tiempo suele durar aproximadamente un mes.
De esta manera, el especialista de HPS, Dr. Sergio Martínez, nos expone la realidad que se vive en la actualidad en los distintos hospitales y clínicas de todo el panorama nacional e incluso mundial, derivada de la propagación del Covid-19.
El Doctor Sergio Martínez nos lo explica en su intervención en la cadena Cope:
A continuación se visualizada la infografía con los datos más relevantes.