Fracturas distales de radio

26 agosto, 2019
El doctor Álvaro Blanco, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica de HPS

Las fracturas distales de radio constituyen una de las causas más frecuentes de consulta en un servicio de urgencias de traumatología. Ocurren generalmente tras una caída sobre la mano abierta, pudiendo presentarse en múltiples actividades deportivas y recreacionales.

“Constituyen sin embargo un grupo bastante variado de lesiones, desde algunas que irán bien con un periodo de inmovilización hasta fracturas que requerirán cirugía para tratar de restablecer una buena función a largo plazo. Trataremos de dar un enfoque práctico a este frecuente problema de salud”, explica el doctor Álvaro Blanco Fernández, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica de Hospital Perpetuo Socorro.

La articulación radiocarpiana está formada por el extremo distal del radio articulado con los huesos de la fila proximal del carpo escafoides en el lado radial (pulgar) y el semilunar en el lado cubital (meñique), presentando la superficie articular del radio una carilla articular para cada uno de estos huesos. El radio articula a su vez con el cúbito en la llamada articulación radiocubital distal. Esta última es esencial en el movimiento rotacional del antebrazo (pronosupinación), siendo estabilizada por el complejo del fibrocartílago triangular (entre la base de la estiloides del cúbito y el radio) así como la cápsula articular y ligamentos de refuerzo. De forma indirecta el piramidal, el otro hueso del carpo que esta al lado del semilunar, articula con el extremo del cúbito mediante el fibrocartílago triangular en ciertas posiciones de la muñeca.

De lo antes expuesto puede concluirse que el tratamiento de una fractura de radio distal debe retomar la anatomía normal, esto es, mantener la longitud del radio, sus inclinaciones normales, restablecer la superficie articular de estar afectada y debe considerar la estabilidad de la articulación radiocubital distal, para obtener un buen resultado funcional.

Como ejemplo de lo anterior, si el radio cura acortado, el cubito será relativamente más largo pudiendo producirse un choque doloroso entre el cúbito y el piramidal (pinzamiento ulno carpiano) al ya no estar al mismo nivel la articulación entre cúbito y radio, puede limitarse el movimiento rotacional del antebrazo. En cuanto a los tipos de fracturas, pueden ser sin desplazamiento o desplazadas, sin afectar a las superficies articulares o extrarticulares, las que afectan a la articulación o intrarticulares; y cerradas o abiertas si comunican o no con una herida.

 El desplazamiento es generalmente hacia el dorso de la mano, la llamada clásicamente fractura de Colles y menormente hacia la palma, conocida como fractura de Smith. Existen varios factores que pueden orientar acerca de la complejidad de estas fracturas en cuanto a su estabilidad o inestabilidad tras la manipulación e inmovilización. Son favorables los mecanismos de baja energía, la angulación inicial menor a 10 grados, el acortamiento inferior a dos milímetros o la ausencia de conminución (múltiples fragmentos pequeños) en el área metafisaria. Por el contrario resultan desfavorables los mecanismos de alta energía, la angulación inicial superior a 20 grados, el acortamiento del radio de más de dos milímetro y la conminución metafisaria.

Lea las lesiones asociadas y el desplazamiento de esta fractura.