— ¿Qué es la celiaquía?
— Es una patología crónica intestinal mediada por la formación de anticuerpos que actúan afectando en un primer momento al aparato digestivo pero que puede llegar a afectar a otros tejidos corporales. Estos anticuerpos se forman por una proteína llamada gluten que se encuentra de forma natural en muchos cereales y alimentos elaborados con ellos e irán produciendo una atrofia de la mucosa del intestino delgado y una disminución de la absorción de nutrientes fundamentales para el desarrollo y la nutrición en general. Esta patología conlleva un tratamiento consistente en la eliminación absoluta de todos los productos que lo contengan sin que ello suponga un déficit nutricional, por lo que es recomendable consultar con un especialista para establecer un diagnóstico y para la elaboración de un sistema de alimentación apropiado.
— ¿Qué alimentos contienen gluten?
— El trigo, la cebada, el centeno y además de todas sus variedades o híbridos, como la espelta, el kamut, la escanda, o el triticale, ya que el gluten es una proteína que se encuentra en estos cereales. La avena en estado natural no lo contiene ,pero presenta muy frecuentemente contaminación cruzada por lo que hay que leer la etiqueta. Pero el gluten no está presente únicamente en estos cereales de forma natural sino en multitud de productos elaborados como pan, pizzas, bollería, dulces o helados, entre otros, por lo que hay que estar alerta para evitar su consumo ya que especialmente el trigo o el gluten de trigo se agrega de forma industrial como sustancia aglutinante, saborizante o colorante.
— ¿Qué productos deben primarse?
— Al margen de la eliminación del gluten, la alimentación del celiaco es igual que a la del resto de la población. Son convenientes controles analíticos periódicos para asegurar una correcta nutrición. Hay que procurar que la dieta sea lo más natural posible, optando por alimentos como verduras, hortalizas, frutas, legumbres, huevos, carnes y pescados. Asimismo, conviene evitar los precocinados, elaborados y/o envasados en los que no aparezca algún aviso de apto para celiacos o sin gluten o libre de gluten.
— ¿Es conveniente eliminar el gluten de la dieta sin tener problemas con su digestión?
— Evidentemente que no. En la actualidad se dispone de pruebas analíticas para detectar anticuerpos que nos pueden dar una orientación bastante aproximada si tenemos celiaquía sin tener que llegar a la biopsia intestinal. Aunque el gluten no es imprescindible y se puede tener una alimentación equilibrada y saludable sin él lo cierto es que los alimentos que lo contienen son ricos en nutrientes como fibra, vitaminas y minerales y forman parte históricamente de nuestra alimentación tradicional por lo que no es recomendable evitarlos si no hay razón para ello. Eliminar cereales con gluten por otros que no lo tenga, podría conducirnos a una dieta deficitaria en hierro, calcio y vitaminas B y D. Además una dieta con productos libres de gluten no supone ningún beneficio para la salud. No existen evidencias científicas de que contribuya a perder peso porque lo que se hace es cambiar un cereal por otro que calóricamente son todos muy parecidos.