— ¿Qué es la mesoterapia facial?
— La mesoterapia facial es un tratamiento que se aplica mediante microinyecciones muy superficiales para la prevención del envejecimiento facial, para mejorar las arrugas y la flacidez, y para conseguir la revitalización global del cutis de la cara.
— ¿Cuándo está indicada?
— La mesoterapia facial está indicada en casos de pieles apagadas, deshidratadas así como para la prevención y en caso de que ya hayan aparecido la eliminación de arrugas superficiales. En las personas jóvenes (en torno a los 40 años) tiene el citado efecto preventivo y proporciona una piel radiante y en las pieles maduras aporta tersura y repara provocando un efecto ligeramente tensor.
— ¿Cuáles son los resultados?
— Tras la administración de un tratamiento de mesoterapia facial se percibe una hidratación profunda, la piel se nota revitalizada, más fresca, con mayor brillo, grosor y mejor textura. Además se eliminan las pequeñas arrugas que puedan existir aunque es preciso otro tipo de opciones ante arrugas profundas o surcos. Una de sus grandes ventajas en suma es que los resultados son absolutamente naturales, la piel se rellena y se vuelve más luminosa. Por otro lado, los contornos faciales se redefinen, otorgándole al rostro un aspecto descansado y rejuvenecido.
— ¿Qué sustancias se inyectan?
— Se trata de un cóctel reparador que cuenta con ácido hialurónico para garantizar la hidratación de los tejidos y prevenir la formación de arrugas así como con vitaminas A, B, C, D y K que participan en la síntesis del colágeno. Además contiene minerales necesarios para el metabolismo celular, ácidos nucleicos: que intervienen en la creación de proteínas de la dermis y aminoácidos y coenzimas.
— ¿Cómo se administra?
La mesoterapia facial se aplica a través de microinyecciones que se introducen hasta la unión dermoepidérmica (donde se juntan las diferentes capas de piel) y que contienen vitaminas y oligoelementos. El paciente simplemente siente una leve incomodidad, dado que se trabaja con anestesia local en crema para evitar que resulte doloroso.
— ¿Requiere de cuidados posteriores?
— Después de realizar este tratamiento, el paciente deberá seguir una serie de recomendaciones y cuidados indicados por su médico entre los que destaca evitar el calor ambiental o local los primeros días además de la exposición al sol y los rayos UVA hasta su total absorción. Respecto a la duración de los efectos es recomendable repetirlo cada nueve meses o cada año.