Doctor Felipe García Flemate, especialista en Traumatología y Cirugía
Ortopédica y Urgencias Traumatológicas de HPS.

Dar a nuestros pies el cuidado que se merecen y elegir el calzado adecuado
son aspectos esenciales para evitar los temidos juanetes, una patología que
han padecido más del 30% de la población a lo largo de su vida y que afecta
más a la mujer que al hombre. Con el doctor Felipe García Flemate,
especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica y Urgencias
Traumatológicas de HPS, conoceremos sus síntomas, factores de riesgo y
tratamiento.

¿Por qué aparece los temidos juanetes y qué son exactamente?
Los juanetes o también llamados “Hallux Valgus” son una desviación lateral
del primer dedo de los pies. El juanete se refiere más a la prominencia y puede
acompañarse o no de desviación del dedo. Las causas son varias y ninguna por
sí sola es determinante en su desarrollo. Por esto, se presta más atención a los
factores que predisponen su aparición. Para una buena alineación del dedo
gordo del pie debe existir un equilibrio entre músculos y tejidos blandos que
actúan a este nivel. Este equilibrio es sensible a factores externos o internos
que actúan facilitando su aparición.

¿Qué factores de riesgo presenta esta patología?
Por un lado, la predisposición familiar. Hay familias de cada generación, donde
las características de los tejidos, formas óseas y articulares predisponen a su
desarrollo, aunque no significa que se hereden.
Otro factor es el uso de calzado estrecho. La mujer tiene un factor de riesgo
más elevado, toda vez que los tejidos blandos son, en ocasiones, más
elásticos, y la sociedad, con frecuencia, impone que el calzado estrecho es más
elegante. En cuanto a las formas del pie, el plano o pie “egipcio”, donde el
primer dedo es más largo que el segundo, puede ser un claro factor de riesgo.
En relación al uso del calzado, el de punta estrecha y de tacón provoca que el
dedo gordo se desvíe progresivamente hacia el lateral por estiramiento de los
ligamentos y de la cápsula interna. Eso puede llevar hacia una deformidad
debido a que las partes blandas que soportan la alineación del dedo son
incapaces de mantener las fuerzas deformantes del calzado.
Asimismo, enfermedades como la artritis reumatoide, que afecta de forma
directa a todas las articulaciones, produce una deformidad de todos los dedos.

¿De qué manera se previene su aparición?
Conviene estar atentos al desarrollo de nuestros pies, hay que cuidarlos y
atender a los síntomas que puedan presentar, ya que nos dan mucha
información acerca de nuestra salud. También es necesario evitar el uso
regular de zapatos con tacón elevado.
Es importante potenciar la musculatura del pie y la pierna: hacer
estiramientos de los tejidos dorsales del pie, a través de la flexión de las
articulaciones de la base de cada dedo. Cuando existen antecedentes
familiares es recomendable una revisión para detectar alteraciones en su
pisada, elasticidad de los tejidos, forma de sus dedos y prescribir, si es
necesario, algún dispositivo ortopédico para mejorar la alineación o la pisada
de los dedos y del pie.

«El síntoma principal es el dolor e inflamación sobre el bulto ocasionado por el juanete. El
dolor se agrava al caminar o usar calzado estrecho y puede llegar a ocasionar una bursitis»

¿Lo sufren más los hombres o las mujeres?
Es más frecuente en mujeres y la media es de un hombre por cada tres o
cuatro mujeres. En los varones, la presencia también es elevada, pero la
molestia es más tolerable, ya que las costumbres del calzado son diferentes.
El número de hombres que llega a solicitar atención médica y a precisar de
cirugía para corregir este problema es menor, siendo el porcentaje de dos o
tres hombres por cada diez o quince mujeres, aunque la presencia de “Hallux
Valgus” en varones sea mayor.

¿Qué tipo de calzado es el adecuado para evitarlos?
Hablamos de zapato de punta ancha y que sea cómodo para caminar. No hay
que sufrir para estar guapo o guapa. Esto evitará la desviación del dedo gordo
e impedirá que quede presionado contra el segundo dedo.

¿Nos enumera sus síntomas?
El síntoma principal es el dolor e inflamación sobre el bulto ocasionado por el
juanete. El dolor se agrava al caminar o al usar calzado estrecho, ya que
provoca el roce del juanete y esto puede evolucionar a una bursitis. Piel callosa
y enrojecida más rotación del primer dedo y se puede cruzar sobre el segundo
dedo.
En ocasiones, el Hallux Valgus no duele, pero ocasiona una alteración en la
forma de pisar produciendo dolor y callosidades en la planta del pie, sobre todo
en el segundo metatarso, siendo la primera manifestación de dolor en el pie.
También pueden producirse desviaciones de los dedos menores, como
consecuencia del juanete y, aunque no duela, puede ser la causa de la
desviación de los dedos menores y provocar mucho dolor.

¿Qué tratamientos existen?
En función de los síntomas se aplica un tratamiento concreto. Las medidas de
calzado, plantillas, prótesis correctoras y ejercicios de equilibrio muscular son

aconsejables, inicialmente. En muchos casos, este tratamiento no funciona y
precisa de una corrección quirúrgica. Hay dos tipos de tratamientos
quirúrgicos: el cerrado que se basa en la cirugía percutánea y es muy utilizado,
independientemente del grado deformidad. Respeta las articulaciones y se
lleva a cabo por pequeñas incisiones, por las cuales se puede resecar el
juanete o practicar cortes óseos que permiten la corrección de los dedos.
Y el tratamiento abierto, que consiste en la utilización de la cirugía abierta que
empleada en todos los pacientes, pero es más recomendable en desviaciones
rígidas que tienen los tejidos blandos muy tensos y que no permiten una
corrección manual suave o en pacientes con artritis reumatoide con
deformidades severas.