Las lesiones agudas, al detalle

19 Fevereiro, 2019

Las lesiones deportivas agudas se producen de forma repentina durante el ejercicio, siendo las más frecuentes las roturas musculares y los traumatismos derivados de una caída. Entre sus síntomas principales, lo que permite que se detecten rápidamente, se encuentra el dolor agudo en una parte localizada, en el trayecto de un músculo.

Las lesiones deportivas pueden ser agudas y crónicas o por sobrecarga. Las primeras se producen de forma repentina durante la práctica deportiva, siendo las más frecuentes las roturas musculares, casi siempre por falta de calentamiento adecuado, o por exceso de fatiga, así como los traumatismos derivados de una caída. Entre sus síntomas principales, lo que permite que se detecten rápidamente, se encuentra el dolor agudo en una parte localizada, en el trayecto de un músculo. La mayoría de estas lesiones se producen por un estiramiento brusco de un músculo, mientras está actuando su antagonista (el músculo que ejerce la acción contraria).

Afecta mayormente a las extremidades inferiores y condiciona que el deportista apenas pueda seguir caminando. El dolor, que aumenta claramente al contraer o estirar pasivamente el músculo lesionado, suele acompañarse al cabo de unas horas de equimosis o hematomas en la región cercana, indica el Dr. Gerardo Garcés, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica de HPS.

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